Muchos de nosotros, además de disfrutar aprendiendo a usar nuevos programas y leyendo o viendo nuevos tutoriales, también disfrutamos d otras formas de entretenimiento.
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Si tú también eres de los que disfrutan poniendo a prueba tu instinto con las apuestas deportivas, es posible que no sepas que las nuevas tecnologías también han ido ganando terreno en este mundo.
Y hasta tal vez no sepas que la inteligencia artificial (IA) está jugando un papel fundamental en este cambio. En este artículo, te voy a contar cómo la IA está influyendo en la forma de apostar de muchos jugadores.
La IA en las apuestas deportivas: ¿cómo está influyendo?
Para empezar, muchos jugadores usan la IA porque esta sirve para analizar grandes cantidades de datos en muy poco tiempo.
De esta manera, la IA puede analizar todos los factores que pueden influir en un partido, como el estado físico de los jugadores, las estadísticas de otros enfrentamientos previos, las condiciones climáticas a la hora del partido, las lesiones de cada equipo, etc.
Con toda esta información al alcance de los jugadores con solo pulsar un botón, no es de extrañar que muchos jugadores usen esa información que en otro tiempo les habría costado horas y mucho esfuerzo conseguir.
Otra razón por la que muchos jugadores aprovechan la IA al hacer sus apuestas deportivas es que la IA es capaz de identificar las cuotas desajustadas. Dicho de otra manera, la IA es capaz de identificar cuotas que no reflejan correctamente las probabilidades reales.
Normalmente, las casas de apuestas establecen estas cuotas basándose en análisis estadísticos y otros factores, pero en algunas ocasiones también estos cometen errores.
En este caso, los algoritmos de IA son capaces de detectar cuándo se producen estos desajustes en las cuotas y hasta de avisarlos antes de que otros apostadores se den cuenta.
Una nueva razón por la que la IA está cambiando las reglas en el mundo de las apuestas deportivas es que permite a los jugadores tomar decisiones menos emocionales. En muchas ocasiones, los jugadores toman decisiones impulsivas.
En estas ocasiones, los apostadores pueden llegar a apostar más de la cuenta porque «sienten» que su equipo va a ganar y se dejan llevar por sus colores. Pero cuando usan la IA, eliminan este factor emocional de la ecuación.
Cuando los jugadores basan sus predicciones en los datos objetivos que les ofrece una IA, al final acaban tomando decisiones más calculadas. Esto no significa que ganen siempre, pero sí que sus apuestas son más seguras en muchas ocasiones.
Otra ventaja de una IA que usan las personas que apuestan es su capacidad para aprender tanto de los aciertos como de los errores. La IA puede analizar sus apuestas pasadas e identificar patrones en su comportamiento y hasta le llega a dar consejos sobre cómo mejorar.
Por ejemplo, si tienden a apostar demasiado en eventos de alto riesgo, la IA les puede sugerir que diversifiquen sus apuestas o que se centren en otros deportes o en otras ligas de las que conozcan más datos.
Por supuesto, es importante saber que la IA no les garantiza a los jugadores de ninguna manera unos resultados 100% fiables. Las personas que siguen los eventos deportivos saben que la mayoría de los deportes son bastante impredecibles y eso precisamente es una parte de su atractivo.
Además, los jugadores habituales hacen bien en tener claro que ninguna IA ni ningún algoritmo puede predecir una jugada milagrosa o un error garrafal de un jugador en el último minuto.